Inicia el año definiendo qué es lo mejor para ti y para tus seres queridos. El divorcio o la separación, ponen tu vida completamente al revés y emocionalmente conlleva situaciones complicadas, no solo financieras o legales, sino también son heridas que llevan tiempo cicatrizar.
Si estás pensando en la separación, tus pensamientos pueden variar, yendo desde las meras y fugaces imaginaciones de cómo sería la vida si estuvieras solterx, hasta el repetitivo y tortuoso proceso de pensamiento de ¿Debería o no debería separarme? Y esos pensamientos recurrentes no pueden silenciarse fácilmente, así que pronto empiezan a afectar la convivencia.
Una vez tomada la decisión, la primera preocupación es cómo afrontar tu divorcio o separación y cómo preservar el bienestar de los hijos durante el proceso. Es importante que te des cuenta de que es necesario trabajar juntos para disminuir el impacto negativo que tu divorcio o separación que puede tener en tu familia y sobre todo en los hijos. No es casualidad que el divorcio esté considerada la segunda causa de mayor estrés por el que pasa una persona a lo largo de su vida, sólo después de la pérdida de un ser querido. Por esa razón reunir información veraz y suficiente es imprescindible para tomar las mejores decisiones legales, y equilibrar las emociones que van surgiendo, es importante para mantener el equilibrio y recuperar cuanto antes la normalidad y el control de tu vida. Escoger al profesional adecuado para que te guíe en este proceso puede resultar determinante para que la carga sea más ligera. Por eso te dejo siete consejos para vivir tu divorcio con serenidad.
1. Deja de pensar en el por qué y céntrate en el para qué.
Desde el reproche no se puede avanzar. Sin lugar a duda existen motivos que te orillaron a tomar esta decisión, pero anclarte en ese punto es limitante. Te propongo cambiar el discurso del por qué, por: para qué. Ante cada decisión a tomar, ante cada pregunta indiscreta, empieza a construir la frase con “para…”. Así conseguirás proyectar a futuro y generar un escenario más motivador, que te haga aprovechar la oportunidad que te brinda la vida con este cambio de rumbo.
2. Cambia la culpa por la responsabilidad.
No asumas más de lo que te corresponde. Este punto es, posiblemente el más complejo de los expuestos. Lo hacemos de forma prácticamente automática, pero nos daña profundamente. Las relaciones establecidas entre los miembros de la familia son responsabilidad de todos, y cada uno debe asumir aquella parte que le corresponde, con consciencia y responsabilidad. Ayuda a tus hijos (si es que los hay), a comprenderlo y les ayudarás a interiorizar uno de los aprendizajes que más les ayudarán el resto de su vida.
3. Controla el gasto de tu divorcio o separación.
¿Cómo llegaré a final de mes? Una fuente de estrés durante la separación de pareja, suele ser la inseguridad económica que se siente ante la responsabilidad de re-organizar la economía personal. Todo es cuestión de organización. Te recomiendo que dediques un tiempo a poner en orden tus finanzas personales, hacer un presupuesto de tus gastos e ingresos, pero también el papeleo correspondiente: cambiar la titularidad de las cuentas, organizar la documentación, cambiar las claves, etc.
4. Valora la calidad y no la cantidad del tiempo que pasas con tus hijos.
A veces la rutina del día a día no deja margen al disfrute, ¿verdad? Asumir las tareas de casa, los deberes, las actividades del fin de semana… Puede que pensar en pasar menos tiempo con tus hijos te genere estrés y tristeza, pero recuerda: Pasa tiempo de calidad y total dedicación. Olvida el móvil, retrasa el trabajo, y dedícales toda tu atención. Llega el tiempo de descubriros de otro modo, de generar nuevos hábitos y disfrutar de otro tipo de actividades.
5. Equilibra el bienestar cuerpo y mente.
Una buena alimentación y descanso serán tus mejores aliados ante los momentos de mayor estrés. Las emociones más difíciles de conciliar en este periodo de toma de decisiones pueden pasar factura. Por eso te recomiendo mantener hábitos saludables que te mantengan a flote: Crea una rutina de horarios de sueño y evita las siestas.
· Haz ejercicio físico a diario, aunque sea sencillamente caminar.
· Procura cenar ligero, y desayuna de forma más saludable. Eso te ayudará a conciliar el sueño y a afrontar el día con energía.
6. Retoma tu vida social.
¿Nuestros amigos tomarán partidos? ¿Qué voy a hacer con mi tiempo libre? La separación de pareja es reveladora a nivel de amistades, y te hace recuperar muchas aficiones que habías dejado atrás por falta de tiempo e incluso por priorizar actividades que hacías en pareja. Ha llegado el momento de recomponer tu círculo social exactamente como a ti te gusta.
7. Escoge a profesionales especializados para tu divorcio o separación.
La orientación adecuada en tu proceso puede ayudarte a tomar las mejores decisiones ahora, para tu futuro y el de tus hijos, escoger al/la profesional que te acompañen en esta experiencia, garantizará un gran resultado, cualquier duda o comentario en:
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